Y eso que no a muchos le gusta porque aunque es muy rico, como que hincha un poquito, jijijijijiji, me refiero al brócoli, pero ojo que él no será nuestro florero de mesa este día, sino las calificaciones que tuvieron algunos alimentos, que si bien fueron evaluados en los Estados Juntos, algunos nos pueden servir como referencia a nuestro chilito lindo.
A través de un reportaje en un diario local (La Tercera) supe del tema que me llamó la atención y se los mostraré tal cual para que vean de que se trata:
Elaboran lista con el valor nutricional de los alimentos
El tema del etiquetado de los alimentos ha sido siempre muy difícil de entender. El sistema de semáforo nos da un vistazo de la cantidad de azúcar, sal y grasa en un producto en particular, pero hasta ahora es voluntario para los productores de alimentos, además de que requiere un poco de trabajo y conocimiento previo por parte del consumidor.
El doctor David Katz, un nutricionista y ex director de los estudios médicos realizados en salud pública en la Universidad de Yale, quien ahora dirige el Centro de Investigación para la Prevención de la misma universidad, es el cerebro detrás de un nuevo índice de calidad nutricional (Index (ONQI)), comercialmente conocido como el sistema de NuVal.
La idea es simple - entre mayor es la puntuación dada a un producto alimenticio, más nutritiva es. Por ejemplo, el brócoli, se encuentra entre las puntuaciones más altas, con 100 puntos (al igual que los arándanos, las naranjas y los porotos verdes), mientras que las bebidas gaseosas obtuvieron sólo un punto.
Hasta el momento, tres cadenas de supermercados en los Estados Unidos han adoptado ONQI, y otras 15 a 20 empresas planean participar el próximo año. Katz espera que se utilizará en un máximo de 7.000 tiendas en todo el país.
Katz dio a conocer ONQI cuando él y un número de otros nutricionistas fueron invitados por el Secretario de Salud de Estados Unidos a presentar ideas para luchar contra la obesidad. Katz quería crear una sola medida de calidad nutricional y aplicarla a todos los productos alimenticios vendidos en los supermercados. Cuando el gobierno no tomó en cuenta su propuesta, Katz obtuvo financiación para desarrollarla en un hospital local.
"Durante mucho tiempo he sido consciente de que cuando se asesora gente para bajar de peso se hace bien. Se les dice que coman una dieta saludable, o que coman una dieta mediterránea, pero nadie los ayuda cuando tienen la difícil tarea de escoger los alimentos. Colapsan en el pasillo de un supermercado, bombardeados con tantos tipos de alimentos diferentes que compiten por su atención- "enriquecidos con vitaminas", "buena fuente de fibra", lo cual es muy difícil traducir todo esto en una buena elección", explicó al diario The New York Times.
ONQI es una guía que enumera los alimentos desde los más nutritivos a los menos saludables, sin embargo su creador llama a no descuidarse y mantener el equilibrio y la variedad en su dieta. Entre los mejores y peores notas tenemos:
El tema del etiquetado de los alimentos ha sido siempre muy difícil de entender. El sistema de semáforo nos da un vistazo de la cantidad de azúcar, sal y grasa en un producto en particular, pero hasta ahora es voluntario para los productores de alimentos, además de que requiere un poco de trabajo y conocimiento previo por parte del consumidor.
El doctor David Katz, un nutricionista y ex director de los estudios médicos realizados en salud pública en la Universidad de Yale, quien ahora dirige el Centro de Investigación para la Prevención de la misma universidad, es el cerebro detrás de un nuevo índice de calidad nutricional (Index (ONQI)), comercialmente conocido como el sistema de NuVal.
La idea es simple - entre mayor es la puntuación dada a un producto alimenticio, más nutritiva es. Por ejemplo, el brócoli, se encuentra entre las puntuaciones más altas, con 100 puntos (al igual que los arándanos, las naranjas y los porotos verdes), mientras que las bebidas gaseosas obtuvieron sólo un punto.
Hasta el momento, tres cadenas de supermercados en los Estados Unidos han adoptado ONQI, y otras 15 a 20 empresas planean participar el próximo año. Katz espera que se utilizará en un máximo de 7.000 tiendas en todo el país.
Katz dio a conocer ONQI cuando él y un número de otros nutricionistas fueron invitados por el Secretario de Salud de Estados Unidos a presentar ideas para luchar contra la obesidad. Katz quería crear una sola medida de calidad nutricional y aplicarla a todos los productos alimenticios vendidos en los supermercados. Cuando el gobierno no tomó en cuenta su propuesta, Katz obtuvo financiación para desarrollarla en un hospital local.
"Durante mucho tiempo he sido consciente de que cuando se asesora gente para bajar de peso se hace bien. Se les dice que coman una dieta saludable, o que coman una dieta mediterránea, pero nadie los ayuda cuando tienen la difícil tarea de escoger los alimentos. Colapsan en el pasillo de un supermercado, bombardeados con tantos tipos de alimentos diferentes que compiten por su atención- "enriquecidos con vitaminas", "buena fuente de fibra", lo cual es muy difícil traducir todo esto en una buena elección", explicó al diario The New York Times.
ONQI es una guía que enumera los alimentos desde los más nutritivos a los menos saludables, sin embargo su creador llama a no descuidarse y mantener el equilibrio y la variedad en su dieta. Entre los mejores y peores notas tenemos:
Brocoli, Arándanos, Naranjas y Porotos Verdes tienen un anota de 100
La Piña y el Rábano 99
Avena 88
Arroz blanco 57
Filete 34
Pan de molde blanco 29
Chocolate amargo 10
Pan blanco 9
Bebidas gaseosas no light 1
Paro aparte de entender o dar valor ciertos alimentos, también hay que considerar cómo comemos, y no me refiero a los tecnicismos, sino como o con que sentido llevamos nuestra comida a nuestro ser, de como elegir adecuadamente aquello que nos da energía, vida, que nos sana o nos hace mal. Al parecer lo que comemos también refleja lo que nos queremos, ya que si nos cuidáramos, nos informáramos y aceptáramos que hay detrás de lo que comemos, pensaríamos más de una vez si deberíamos llevarlo a la boca. Es cierto que hay cosas que el rubro industrial las hace muy rica, sabrosas con mucha azúcar, masas y aliños varios, pero en el fondo si somos sinceros, son disfraces de una lenta y segura saga de enfermedades y hasta la muerte.
Aparte hay que empezar a ver el transfondo de la industria alimenticia de hoy en día, lo que genera incluso a nivel ambiental y no nos damos cuenta, de destrucciones de terrenos, bosques, aguas servidas, maltratos y un sin fin de otros descontroles que podrían ser eliminados si fuéramos más consientes de nuestro plato. No se trata de que no comamos más, si pudiésemos tener nuestras propias plantaciones sería genial, pero si de alguna manera, por mínima que fuera, nos tomáramos el tiempo de dejar ciertas cosas por lo menos disminuir su consumo, estaríamos haciendo algo grande aunque no lo pareciera.
Me gustaría que pudiesen leer este artículo que me hizo algo de click en la cabeza y en el corazón.
Como siempre digo, no pretendo hacer que nadie cambie, sólo quiero ser una lucecita, porque yo también necesito saber un poco más, redescubrir y entender como puedo mejorar mi vida y la de quienes quiero y por que no, la de quienes me rodean, o sea, de ustedes.
Lean esa columna de verdad está muy bonita. Muchos cariños y paz para todos ustedes, Vanesa Pino.
